¿Cómo crecen nuestros árboles? ¿Qué nos dicen sobre el cambio climático? A estas preguntas busca responder la Red Federal Bosque-Clima, una iniciativa científica que acaba de instalar la primera estación dendrométrica en la provincia de Córdoba, en la Reserva de la Defensa de Ascochinga, gracias a la colaboración entre el Área de Morfo-Anatomía Ecológica del Instituto Multidisciplinario de Biología Vegetal (IMBIV, CONICET-UNC), liderada por Diego Gurvich, y el Instituto Argentino de Nivología, Glaciología y Ciencias Ambientales (IANIGLA, CONICET-UNCuyo).
Escuchar a los árboles para entender el cambio climático
Los bosques nativos cumplen funciones vitales: regulan el ciclo del agua, almacenan carbono, protegen la biodiversidad y brindan recursos madereros y energéticos. Sin embargo, el cambio climático está afectando su dinámica de crecimiento y la provisión de estos servicios ecosistémicos.
Para enfrentar este desafío, se creó la Red Federal de Monitoreo del Crecimiento de Bosques Nativos en Argentina (RED BOSQUE-CLIMA), que organiza estaciones dendrométricas en distintas regiones del país para medir en detalle cómo crecen los árboles y cómo responden a las fluctuaciones ambientales.

¿Qué es una estación dendrométrica y por qué es importante?
Las estaciones dendrométricas utilizan dendrómetros de alta resolución que registran de forma continua y precisa el crecimiento del diámetro de los árboles en escalas de micrómetros, junto con sensores de temperatura y humedad del suelo.
Esto permite detectar:
- Cuándo comienza y termina la estación de crecimiento leñoso de cada especie.
- Qué condiciones ambientales regulan su crecimiento.
- Cómo eventos climáticos de corta duración (olas de calor, lluvias extremas) impactan en el crecimiento de los árboles.
Estos datos son fundamentales para proyectar los cambios más probables en nuestros bosques durante el siglo XXI y orientar a tomadores de decisiones en estrategias de manejo forestal y adaptación al cambio climático.




El turno de Córdoba
Hasta ahora, la red RADAR (Red Argentina de Dendrómetros de Alta Resolución), liderada por Ricardo Villalba, tenía su foco principal en la Patagonia andina, monitoreando especies como alerces, araucarias y lengas. Luego se instalaron estaciones en el norte Argentino, cubriendo ecosistemas de las Yungas, Selva Paranaense y Bosques Chaqueños.Con la nueva estación instalada en Córdoba, se cubren regiones y especies poco representadas, ampliando el monitoreo al bosque chaqueño serrano.
La instalación en Córdoba, realizada en colaboración entre el IMBIV y el IANIGLA, representa una expansión estratégica de esta red federal, garantizando que cada región del país pueda aportar datos valiosos para entender las respuestas de los bosques nativos al cambio climático.
La estación de Córdoba monitorea molles (Lithraea molleoides), el principal árbol de los bosques serranos de la provincia.
Ciencia colaborativa con impacto
Este proyecto forma parte de las Redes Federales de Alto Impacto, integrando la experiencia de la Red Argentina de Parcelas Permanentes (RAPP) y RADAR para estudiar la dinámica forestal en diferentes escalas de tiempo, desde cambios diarios en árboles individuales hasta variaciones a lo largo de años en rodales completos.
Además de generar información esencial para la conservación y el manejo sostenible de los bosques, esta iniciativa fortalece la formación de recursos humanos mediante tesis de grado y posgrado, asegurando que más personas puedan trabajar por la protección de los bosques y la lucha contra el cambio climático en Argentina.
Cuidar nuestros bosques para cuidar nuestro futuro
Los árboles no solo crecen: nos cuentan cómo está cambiando el mundo a su alrededor. Escucharlos a través de estas estaciones dendrométricas nos permitirá anticipar escenarios, proteger los bosques nativos y tomar mejores decisiones en un mundo en cambio.
En Córdoba, este primer paso fortalece la ciencia federal y el compromiso de la comunidad científica con la conservación de nuestros bosques, una pieza clave en la lucha frente al cambio climático.